Cuando estudio un libro viejo de teorías de la comunicación siendo que no lo necesito para el trabajo. Cuando estudio un idioma siendo que no lo necesito para un viaje o para algo en particular. Cuando escribo una novela siendo que no sé si a alguien más va a interesarle leerla.
Cuando estoy ahí es como estar sentada sobre el pasto y bajo la sombra en un día de sol: sólo intento llegar a mí misma, estar conmigo. Desafío a mi mente que hace tanta fuerza que la siento en diferentes partes del cuerpo. Me contraigo para expandirme, entro en lo profundo de mí sólo para mí, sólo por mí, sin otros motivos. No intento llegar a ningún otro lado que no sea a mí misma.
Cuántos límites hubiese puesto antes, cuántos límites no hubiese dejado que me pongan antes, si hubiese tenido esto tan claro. Y ahora que está claro, ¿qué hay de los límites?
