Es septiembre, es la hora de la siesta y hace calor. En Cruz del Eje siempre hace calor. Llego a mi colegio y un papel rebelde, arrastrado por el viento de esa tarde llega hasta a mí. Todavía faltan unos meses para tomar la decisión, pero ya sé que no estudiaré abogacía.
Me agacho porque no me gusta ver basura en el piso y levanto ese papel. Es un folleto. Lo abro y veo la palabra COMUNICACIÓN. Sé que ese será mi camino cuando el corazón pega fuerte y sonrío sin que nadie me vea. Acá estoy ahora.
