En el libro de Hebe hay muchos consejos para estimular y mejorar la comunicación con nuestros hijos/as.
Les comparto este que me parece básico y hasta obvio, pero que aplica también a adolescentes. ¿Y por qué no adultos?
En los cursos de oratoria siempre aparece el mismo tema: el miedo a comunicar. ¿Pero no es acaso parte de nuestra condición humana? Me gusta esta parte del libro porque nos habla de que la COMUNICACIÓN DEBE SER UN HÁBITO COTIDIANO Y NATURAL.
Acá dejo algo más:
“Una correcta comunicación implica mucho más que aprender a hablar, o a usar la palabra como medio de comunicación. ¿Qué significa entonces? Un buen desarrollo de la habilidad comunicativa en el niño se relaciona con aspectos tales como que despliegue confianza, seguridad, alta autoestima, bienestar y autonomía.
La estimulación de LA COMUNICACIÓN DEBE SER UN HÁBITO COTIDIANO Y NATURAL que se incorpore a la rutina de los miembros de una familia sin importar sus horarios ni actividades. La forma en que está planteada la vida moderna hace que a veces sea complejo que haya cantidad de momentos de encuentros, pero es importante que cuando sucedan, sean de calidad. Para ello, debemos volver a conectarnos de la forma más genuina: mirándonos a los ojos, compartiendo a través del lenguaje, de las palabras y los gestos.
Es importante que la comunicación se desarrolle como un proceso esencial de la vida familiar.”
Si querés saber cómo comprar este libro esencial, escribime y te cuento!
